Bueno, pues llegó uno de esos viajes con el que soñaba, y que ha sido de lo más especial.
Ha sido un viaje de contrastes,de aprender mucho, de comer muy bien, y de conocer sitios preciosos.
Aquí hago un repaso de nuestros 10 días en Cuba. Lo primero de todo, decir que nuestro viaje ha sido organizado, pero se puede hacer perfectamente, con total seguridad por libre.
DÍA 1
Llegada
a la Habana desde Madrid,unas 9 horas de vuelo. Recordar que en Cuba
son 6 horas menos con respecto a España. A la llegada, tienes
posibilidad de cambiar euros a pesos convertibles(CUC), hay una
especie de cajeros, en los que tienes que meter el pasaporte y pones
la cantidad de dinero que quieres cambiar, si necesitas ayuda, hay
unas asistentes, porque es de lo que más te preocupa al cambiar de
país, cambiar dinero!! Pero con tranquilidad,normalmente puedes cambiar dinero en tu hotel, suele tener un horario, pero por ejemplo el nuestro, se podía cambiar dinero hasta las 10 de la noche.
Nuestro
viaje fue a través de Qatai, por lo que a la llegada, cuando ya has recogido tu maleta tienes que
buscar el stand de Qatai.
Allí
estaba nuestro súper guía del viaje Yadian y nuestro chófer Lázaro para acompañarnos durante el viaje...
Desde
el aeropuerto al hotel había una media hora de camino, teníamos
contratado el Iberostar Parque central, en la misma plaza que le da
su nombre, sería nuestro hotel durante 3 noches en principio, porque volvíamos de nuevo otra noche después del Cayo Sta María. Como
era ya muy tarde, decidimos quedarnos y descansar, pero disfrutamos
de sus vistas al Capitolio desde la primera noche.
DÍA
2
Debo
decir que el desayuno del hotel es perfecto. A las 8 y media estaba
Yadián en la puerta del hotel esperándonos para comenzar la visita
de la ciudad.
Empezamos
el recorrido en el mismo Parque central, dónde se sitúa la estatua
de José Martí, que se considera el héroe de la revolución por la independencia, además
del Gran teatro de la Habana, el Museo Nacional de Bellas artes, y el
Hotel Inglaterra, donde se quedaba Churchill y se fumaba los famosos
puros Romeo y Julieta.

A las puertas del Hotel Parque Central

Al fondo, el Hotel Inglaterra
Muy cerquita estaba el famoso Capitolio, que se encuentra en obras de rehabilitación(se espera que esté listo para las celebraciones del 5º Centenario de la Habana, que son en Noviembre)
Desde allí, nos introdujimos en la Habana Vieja.Te encontrarás el edificio Bacardi, Plaza San
Francisco de Asís, la Plaza vieja,el Floridita,la Bodeguita
del medio, en la calle Empedrado, donde disfrutas de su mojito al
ritmo de la música, da justo a la Plaza de la Catedral.Pudimos
entrar en ella y conocer que la patrona es la Virgen de la Caridad y
el patrón San Cristobal.

Catedral de la Habana

Plaza de S.Francisco


La Bodeguita
A continuación, nos encontramos con la plaza de Armas,desde donde puedes ver el Castillo de la Real fuerza.
En
resumen, importante, tener tanta suerte como nosotros con nuestro
guía, o bien que también la llevábamos, la guía Lonely planet y plano en mano.
Otra
opción si no tienes guía es coger una bici taxi, como hicieron unos
amigos, (le pagas aproximadamente 20 o 30 CUC,está contigo las horas
que estiméis y te va guiando,enseñando los sitios más
emblemáticos), un taxi normal, o un cocotaxi, que creo que era la
opción más barata.
Una
vez que terminamos la visita de la Habana vieja, cogimos el mini bus,
para recorrer el Malecón, conocer la Habana moderna y comer en un
restaurante que se llama 1860, recomendable 100%.

Jardín del restaurante 1860
Desde
allí, cogimos de nuevo el minibus y fuimos a la plaza de la
Revolución, donde te haces la típica foto tanto con la imagen del
Che Guevara como con Cienfuegos, y a continuación nos llevaron a una
tienda en la que vendían puros,ron y café, la esencia del país.

Plaza de la Revolución
Luis
y yo compramos un Romeo y Julieta para llevarlo a los padres, y nos
habló del mejor ron de Cuba que no encontraremos fuera, es el Ron
Santiago.
Una
vez que terminamos, nos dieron la tarde libre, aprovechamos para
descansar y conocer la piscina del hotel.
A las 8 y media teníamos reserva en uno de
los mejores y más pintorescos restaurantes de la Habana, se llama La
Guarida, hicimos la reserva a través de internet desde España. Y
qué mejor manera que ir al restaurante que en un coche de los años
50.
En
la misma plaza del Parque central hay muchísimos coches de este
tipo, que realmente son taxis. Nosotros lo contratamos para que nos
diera una vuelta por la Habana de 1 hora aproximada de duración, el
precio oscila desde los 35 a los 50 CUC,lo hablas con el chófer
antes de subirte, nosotros lo dejamos en 35 Cuc pero al bajarnos al
final le dimos 40. Es una pasada, como amante de los coches clásicos
me hizo muchísima ilusión disfrutar de la ciudad subida en uno de
ellos, nuestro chófer iba vestido como un auténtico cubano, con su
guayabera, que es la camisa típica cubana blanca de lino con 4
bolsillos y el típico sombrero.
Nos dejó en la puerta de la Guarida.Merece la pena ir 5 minutitos antes
y echarte fotos en las impresionantes escaleras de acceso al
restaurante,aquí dejo algunas…
Recomiendo
tanto las vistas del hotel, como la comida. Probamos los tacos
pastor, que estaban hechos con pez Marlin ahumado, el pollo
acompañado de malanga, que es un tubérculo parecido a la patata,
Luis se pidió ropa vieja, que es otro de los platos típicos de la
comida cubana, que casi siempre se acompaña de arroz congrí,y a
parte pedimos yuca frita.
Es
un sitio muy tranquilo, con pocas mesas. Subiendo el mismo edificio
hay una terraza, que se llama El mirador, en el que nos tomamos el
típico cóctel cubano, el daiquirí.
Una
vez que disfrutamos de las vistas de la ciudad, de la música y del
cóctel nos fuimos hacia el hotel.100% seguro ir andando por la
ciudad de noche, si en otros sitios no lo harías, ten seguridad de
que en la Habana no te pasaría nada.
DÍA
3
El
tercer día era excursión a Pinar del Río ,Viñales,declarado
Paisaje cultural protegido por la Unesco y Monumento Nacional
Natural. Desde la Habana son unas 3 horas de recorrido. Por el camino
paramos y pude probar la piña colada más rica de mi vida,te la
preparan en un coco, cuesta unos 6 CUC...merece mucho la pena.
De
la breve parada ya llegamos a Viñales. Cogimos una barquita para
recorrer la cueva del Indio,por el río que recorre su interior y
pudimos disfrutar del valle, es precioso, sin palabras, de lo más
bonito que vimos en Cuba.
De
la cueva del Indio,nos llevaron a la casa de un veguero, que tiene
sus propias plantaciones de tabaco, y hace sus propios puros de forma
artesana, de esta forma te animas a probar este tipo de puros. Además pudimos probar el ron que ellos mismo elaboran.
Ya
desde la casa del veguero nos dirigimos al Mural de la prehistoria, y
pudimos disfrutar de sus vistas mientras comíamos en el restaurante
que hay justo al lado.

Mural de la prehistoria
Nos dimos cuenta que es muy típico, que te pongan de entrante una
ensalada que acompañan de fruta también, ya sea, mango, papaya,
guayaba... de plato principal que suele ser cerdo, en este caso asado,
acompañado del arroz congrí(tiene un color oscuro porque se cuece
en el mismo agua que los frijoles) y malanga cocida. Todo súper
rico.
Una
vez que comimos, nos dirigimos al Mirador de los jazmines , para
poder disfrutar por última vez de las hermosas vistas del valle de
Viñales.

Mirador de los jazmines
A la
vuelta de Viñales, teníamos contratado espectáculo y cena en el
Guajirito. Es el típico espectáculo de salsa, pero más auténtico,
si lo comparas con Tropicana y más barato, además hacen participar a
la gente que va allí.
Tienes
reserva de tu mesa, pero va por orden de llegada, lo mejor es ir
sobre las 8 de la tarde, para coger buen sitio, cenar
tranquilamente antes de que comience el espectáculo que es sobre las 9 y
media de la noche. El precio de cena y espectáculo es de 60
CUC(Tropicana es de unos 80), si solo quieres espectáculo es 30 CUC.
Dentro de la cena, hay para elegir varios platos tanto primeros como
segundos y postre, además te incluye 3 cócteles o bebidas. De los
platos que probamos de lo más típicos fue el hummus de frijoles, y
Luis se pidió la picada, que es carne picada de res, que la
acompañan de aceitunas y verduras, estaba realmente bueno, eso sí,
que no falte nunca el arroz congrí.
Los
músicos y cantantes del espectáculo te introducen en la Habana de
los años 50 y son músicos del Buena Vista Social club, que tienen
bastante fama en Cuba.
Después
del espectáculo decidimos volver también andando, estaba muy cerca
del hotel.
DÍA
4
Este
día teníamos que cargar las maletas porque nos dirigíamos a
Cienfuegos e íbamos a dormir allí. Nuestro hotel era el Meliá San
Carlos, también lo recomiendo 100%, la verdad que hemos tenido mucha
suerte con la atención, servicios de los hoteles…
La
distancia a Cienfuegos era también de unas 3 horas. Es conocida como
la Perla del sur. Recorrimos sus calles y avenidas fundadas por los
franceses. La ciudad está situada en una hermosa bahía , donde se
encuentra el mayor coral de Cuba. Nos dirigimos al Palacio del
Valle,donde pudimos comer y visitar el mismo palacio, construído por
un español, en el que se mezclan muchísimos estilos, gótico,
románico, mudéjar, hizo intento de recrear el patio de los leones
de la Alhambra...
Recorrimos su plaza principal, su ayuntamiento,
todos por cierto engalanados con banderas debido a su festividad del
26 de Julio.
Desde
allí,nos dejaron 1 hora de tiempo libre para recorrer sus calles por
nuestra cuenta. Al final de la calle que te dirige al muelle,
descubrimos una especie de kiosko que te servía unas piñas
coladas…mmmm, a sólo 1 CUC, no me extraña que estuviera lleno de
gente local, además de cócteles, servían otros jugos, sandwich,
brochetas de pollo… el lugar se llama el Muelle real.
Nos
recogieron en la plaza principal y nos llevaron hasta el hotel.
*No
os había hablado aún del acceso a Internet…
Os
explico, dependiendo de los hoteles, en el de la Habana,nos dieron
acceso a través de unas claves de usuario y contraseña, de cortesía
nos dieron acceso a 12 horas para los 3 días que estuvimos en la
Habana(te sobra), eso sí, el wifi no llega bien a las habitaciones,
con seguridad siempre en el hall del hotel.
En
el de Cienfuegos era diferente, el WIFI llegaba bien a la habitación
pero tenías que comprar unas tarjetas para el acceso, cada tarjeta
tiene 1 hora, cuesta 1 CUC , y te dan también un usuario y
contraseña. Estas mismas tarjetas son las que se pueden utilizar si
ves por la calle la señal de WIFI, pero de verdad, que deconectar
totalmente no está nada mal
Después
de hacer el kit kat con el internet...
Descansamos en el hotel porque
por la tarde recorreríamos en un ferri la bahía de Cienfuegos y
poder ver el atardecer desde él, y que no falte la vitamina R(ron),
incluyendo un ron con cola.

Ferri de Cienfuegos
La
cena la teníamos en el hotel y las vistas eran espectaculares,
además de la comida súper rica.

Vistas del hotel
DÍA
5
Dejaríamos
atrás Cienfuegos y la primera parada fue en el delfinario que
pertenece a Cienfuegos, lo bueno que podemos decir de este delfinario
es que no están en piscinas, si no que el delfinafio está dentro
del mar, por lo que no tienes tanto la sensación de que los delfines están en cautiverio. Pudimos disfrutar interaccionando con los delfines, te hacen las
típicas fotos con ellos,(que como no te vas a llevar, ya que estás
allí...) a parte de ver el espectáculo que lo hacen muy
participativo con la gente que está en él. Si quieres nadar con
ellos, el precio es de 50 CUC
Ya
pusimos rumbo a Trinidad, que sin duda, me cautivó.
La
primera parada fue en un taller de artesanía en el que elaboran
además de otras cosas, las típicas vasijas de barro en la que se
sirve su cóctel típico, la Canchánchara, nosotros nos llevamos
una, además puedes hacerte con pulseras, llaveros que quieras llevar
de recuerdo. Dejando el taller, ya nos acercamos hacia su zona
céntrica, en la que vimos su plaza mayor, la iglesia de la Santísima
trinidad, sus callejuelas, y pudimos probar la canchánchara que se
hace con agua, limón, miel, ron y hielo...con el calor que hacía
entraba realmente muy bien y tienes música en directo, no se podía
pedir más.




La Canchanchara
Terminando
con la canchánchara, nos dirigimos al restaurante, que era como una
hacienda típica cubana, de suelos vinílicos(soy una enamorada de
las baldosas antiguas).

Collage con algunos de los suelos que vi
De allí, hasta el hotel a descansar.
Esa
tarde llovió como si no hubiera un mañana, una tormenta eléctrica
impresionante, como suelen ser las tormentas, eso sí, solo media
hora.
Cuando
dejó de llover, pudimos dar una vuelta antes de ir a cenar langosta,
ya que era nuestra última noche con Yadián y Lázaro. Por 20 CUC
comes de sobra, pusieron unos entrantes, una sopa de marisco, una
langosta a la plancha ya limpia por persona, junto con bebidas y
postre, para poner el broche final en Trinidad, el restaurante se
llama El Galeón, está a las afueras de Trinidad y es muy
recomendable
A la
vuelta de la cena, decidimos vivir la noche trinitaria,nos acercamos
como nos dijo Yadián a la Casa de la Música, que se encuentra justo
al lado de la plaza Mayor de Trinidad, son unas escalinatas, abajo te
piden 1 CUC de entrada, y puedes disfrutar de música auténtica
cubana, tradicional, mientras disfrutas de sus cócteles. Otra ciudad
100% segura a la hora de salir por la noche y con muy buen ambiente.
DÍA
6
Dejando
atrás Trinidad nos dirigimos hacia San Isidro de los destiladeros en
el Valle de los Ingenios,situado en la provincia de Sancti
Spiritus,siendo el ingenio más antiguo.Se trataba de pequeñas
poblaciones alrededor de la explotación de la caña de azúcar, el
de San Isidro es el más antiguo y completo que se ha conservado.
Además de ver la casa vivienda en la que vivían los señores, tenía
su torre campanario que servía tanto para alarmar de la presencia de
algún incendio, para comunicarse con otros ingenios, o incluso de
aviso de que algún esclavo se escapara, además se aprecia donde
estarían los antiguos barracones para estos esclavos o sus calderas
o sistemas industriales para la explotación azucarera entre los
siglos XVIII y XIX.

Hacienda
Además
de éste, visitamos el de Manaca Iznaga, que tiene la torre más alta
que se conserva, a la cuál puedes subir si no tienes vértigo y
estás dispuesto a subir mas de 150 peldaños, unos 45 metros, y
ofrece unas vistas increíbles del valle. Conserva también su casa
hacienda convertida en restaurante.
En
sus calles venden también artesanía de la zona, sobre todo
mantelería.
Y
pusimos rumbo a Santa Clara, donde se encuentra el mausoleo y museo
dedicado al Che Guevara, cuenta su historia desde la infancia hasta
su muerte a través de objetos, documentos , escritos…
Muy
importante,no se puede llevar cámara de fotos,ni bolso, no
te dejarán entrar, así que deja lo que lleves en el coche/bus…
Una
vez que terminamos, comimos en ruta y nos dirigimos hacia el Cayo
Santa María
Alli
ya nos despedimos de nuestro súper guía y súper chófer.
DÍA
7,8 completos en el Cayo Santa María
Nuestro
hotel se llamaba Paradisus los Cayos, tiene una playa impresionante,
con el azul más bonito que he visto en mi vida, tuvimos buen tiempo,
mucha vitamina R, mucho reggaeton, mucha piscina con barra...las
habitaciones son muy bonitas. Un “paradisus” para ir terminando
el viaje.


El
día 9 , ya fue la recogida para llevarnos de vuelta a la Habana. Son
6 horas de camino, nos recogían a las 3 de la tarde por lo que
llegamos justo para volver al hotel, de nuevo el Iberostar Parque
central, descansar, cenita rápida, y descansar para poder aprovechar
nuestra último día en la Habana.
DÍA
10
Mañana
de disfrute y aprovechar para hacer un repaso de nuevo a la Habana.
Comenzamos
en el parque central de nuevo, cogimos el Paseo del Prado(si,como el
de Madrid), para terminar en el Malecón,me recuerda tanto a
Cádiz...el castillo de San Salvador, como si estuvieras en Cádiz en
el de Santa Catalina.
Paseo del Prado

"Último mojito"...hasta próxima visita

Edificio Bacardi

Galería de arte


Malecón

Castillo de los 3 Reyes del Morro
Vimos la embajada de España en la Habana, el
museo de la Revolución, el edificio Bacardy, y sorpresa, en una
callejuela de lo menos transitada nos encontramos con nuestros amigos
de Almería, y quedamos con ellos a las 2 en la Bodeguita del medio,
que conoce todo el mundo, y ellos pudieran seguir su ruta en bici
taxi. Continuamos de nuevo pasando por su Plaza vieja, su Catedral,
(desde la catedral, mirando de frente, en los portalillos de la
izquierda, hay una estatua de bronce, del famoso bailarín español
Antonio Gades),su Plaza de Armas,de nuevo la Plaza de San Francisco
de Asís, en ella hay una figura, que quien la toca tal y como
aparece Luis, le dará suerte.
Hora
de comer, reservamos mientras paseábamos en Doña Eutimia, que muy
bien nos recomendó Yadián, está justo al lado de la catedral, es
cocina tradicional cubana. Disfrutamos probando el famoso arroz a la
cubana que tanto comemos en España, sus garbanzos fritos, el lechón
asado, siemrpe acompañado de arroz y frijoles y los tostones
rellenos, que es una base de patata, que la rellenan o bien de jamón
y queso, picada, atún con mayonesa, ropa vieja…


Mereció
mucho la pena nuestra última comida en la Habana(de momento), de
allí nos dirigimos a la Plaza vieja, en unos de sus soportales hay
una cafetería que se llama Escorial, os recomiendo que probéis el
Daiquirí café, es como una especie de granizado, con licor de café,
refrescante y rico, y no nos podíamos ir de la Habana sin probar el
famoso daiquirí en el Floridita. Lo ves por fuera y no te esperas
como es por dentro, abre la puerta y parece que te introduces en otra
época, suena música en directo, sus telón al fondo,Heminghway en
su esquinita, ese daiquirí, el más rico que he probado, merece la
pena sus 6 CUC.
De
allí directos al hotel Parque central,nos recogían para llevarnos
al aeropuerto,y poner fin a unos de los viajes más bonitos que hemos
hecho juntos.
Gracias
como siempre a mi compañero favorito de viajes, de vida, mi “persona
favorita”, la persona que me protege, me guía, esa persona con más
orientación que conozco, y como no, que me quiere, y me da muchas
alegrías…Ah, y que tiene muuuuuuucha paciencia cuando le pides
fotos, esta no me gusta, en esta salgo mal, repite porfiiii :)
Además
quería hacer una mención especial a ti Yadián, te lo voy a pasar
para que lo leas,y conozcas mi punto de vista sobre Cuba. Gracias
por enseñarnos tanto,no solo de historia, de cultura, de anécdotas,
de recomendaciones gastronómicas, de música … Siempre con tanta
humildad. Espero que alguna vez nos volvamos a ver, ya sabes que
tienes una casa al sureste de España